jueves, 15 de julio de 2010

PARADIGMAS POLÍTICOS. DEL PARADIGMA TRADICIONAL AL AUTORITARIO.

¿QUÉ ES UN PARADIGMA POLÍTICO?

El término paradigma proviene de la palabra griega paradeigma que significa
"modelo" o "ejemplo". El significado contemporáneo del término se debe a Thomas
Kuhn quien lo adoptó para referirse al conjunto de prácticas que definen una
disciplina científica durante un período específico de tiempo. En el libro “La
Estructura de las Revoluciones Científicas” se encuentran las referencias del
término.

PARADIGMA TRADICIONAL.

Nos aproximamos en esta lección a los postulados generales de Aristóteles (384
a.C-322 a.C) acerca de la política. Estos se condensan en su obra “Política”. Se
destaca la idea de que el poder estatal no debe estar en manos de los ricos ni de
los pobres, sino pertenecer a la capa media de los esclavistas, pues según se
admite, la virtud de halla en término medio. Divide las formas de gobierno en
normales (monarquía, aristocracia, politeia) y anormales (tiranía, oligarquía y
democracia); tomando por partido por la politeia como la forma ideal de Estado, en
la que se define el bien común, la felicidad.

PARADIGMA LIBERAL.

Maquiavelo (1469-1527) diferencia la política de la moral y de la religión,
despojando al Estado de toda dependencia espiritual, el Estado se concibe laico,
sentando las bases de una Teoría Política autónoma. La política es un juego de
voluntades individuales, un arte de calcular. Más tarde, Hobbes (1588-1679)
considerará al Estado como un acuerdo natural entre los poderosos o gobernantes
y los súbditos que beneficia a ambos. El estado de naturaleza es anterior a la
organización social es la "guerra de todos contra todos". Cuando el hombre se da
cuenta de que no puede seguir viviendo en un estado de guerra continua, surge la
ley de naturaleza, que limita al hombre a no realizar ningún acto que atente contra
su vida o la de los otros; entonces cada hombre renuncia o transfiere su derecho a
un poder absoluto (Leviathán) que le garantice el estado de paz.

PARADIGMA MARXISTA.

Marx (1818-1883) sienta las bases teóricas de una concepción científica del
mundo diferente hasta entonces: el socialismo como transición al comunismo. Los
desarrollos teóricos serían complementados con Engels (1820-1895) y la primera
gran revolución estaría dirigida por Lenin (1870-1924). Resaltamos algunos
postulados básicos.
El materialismo histórico: la actividad práctica del trabajo es la base sobre la que
se sostiene la humanidad y se desarrolla su historia. El materialismo dialéctico:
considera que no existe más realidad fundamental que la materia; pero la materia
no es una realidad inerte, sino dinámica, que contiene en sí la capacidad de su
propio movimiento, como resultado de la lucha de los elementos contrarios, siendo
la contradicción la esencia de la realidad, que se expresa en el movimiento
dialéctico.

PARADIGMA AUTORITARIO.

Este paradigma encuentra expresiones en la tiranía, el despotismo, el
bonapartismo, el totalitarismo y la dictadura; se hará énfasis en las nefastas
experiencias del nazismo y el fascismo.
La tiranía se ha identificado con un uso abusivo y cruel del poder político que, por
lo general, se ha usurpado. El despotismo, por su parte, supone una forma de
gobierno personal o grupal que impone control absoluto de todo ciudadano.

PARADIGMAS POLÍTICOS. DEL PARADIGMA
POSTMODERNO AL REPUBLICANO.

PARADIGMA POSTMODERNO

Para entender el paradigma postmoderno, conviene aclarar inicialmente los
conceptos de modernización, modernismo y modernidad. Así, la modernización se
asocia a cambios cuantitativos en los niveles de desarrollo económico, industrial,
tecnológico y cultural. El modernismo se refiere a proyectos culturales,
movimientos artísticos e intelectuales que tuvieron lugar durante el siglo XX.
La modernidad se refiere a una época histórica, que la mayoría de los autores
sitúa desde el inicio de la Revolución Industrial (fines del siglo XVIII), caracterizada
por: la consolidación del Estado Moderno, en lo político; en lo económico se inicia
la consolidación de los principios fundamentales del capitalismo; en lo social ya no
existen siervos sino ciudadanos; en lo filosófico se presenta el predominio de la
razón y de lo verificable.

PARADIGMAS CONSENSUAL, MULTICULTURAL Y
COMUNITARISTA.

El paradigma consensual lo presentamos a través de las tesis de J. Rawls (1921-
2002) y J. Habermas (1929-), dentro de lo que se ha dado en llamar el
neocontractualismo. Para Rawls, en oposición al utilitarismo, que considera la
evaluación de resultados para analizar la bondad o maldad de una decisión
pública, una decisión no es más justa o menos por los resultados que genere, sino
que lo es en función de los procesos o mecanismos que conducen a dichos
resultados; lo que podría ser “bueno para todos”, “lo justo”, a diferencia de lo que
sólo es “bueno para algunos”, depende de los acuerdos u organización social del
colectivo y de si ésta es equitativa o no.

PARADIGMA NEOLIBERAL.

Desde los años setenta se empieza a hablar de neoliberalismo a nivel mundial. En
lo económico se contrapone a la teoría de la intervención estatal propuesta por
Keynes, sentándose las bases para el imperio del libre mercado en el que se
considera que la libertad económica genera también libertad política y otras
libertades por cuanto separa al poder político del poder económico y permite que
uno controle y contrarreste al otro.
El neoliberalismo propende porque se deje en manos de particulares las
responsabilidades que antes eran del Estado, en esa dinámica se privatizan
empresas públicas, se abren las fronteras para mercancías, capitales y flujos
financieros y se reduce el Estado.

PARADIGMA NEOMARXISTA.

E. Bernstein (1850-1932) hace una relectura de Marx, preocupado por la cuestión
práctica relativa al proceso evolutivo del capitalismo al socialismo; consideraba
además, que los socialistas constituirían el partido del proletariado, más no la
dictadura del proletariado. Bernstein influiría mucho con la idea del
cooperativismo, en la socialdemocracia europea durante la segunda mitad del
siglo XX. Como neomarxista, también es reconocido H. Lefébvre (1901-1991)
quien puso su acento en un marxismo humanista, influyendo con su pensamiento
en los jóvenes que lideraron las jornadas de mayo de 1968; dedicó buena parte de
su vida a los estudios de la ciudad y su espacio social, la vida cotidiana y el
fenómeno de la modernidad.

PARADIGMA REPUBLICANO.

Para el republicanismo clásico la política debe llegar a ser una actividad en la que
los ciudadanos desarrollen sus potencialidades individuales una actividad continua
y militante, de carácter deliberativo, que permita que todas las decisiones públicas
sean producto de una reflexión en la que puedan participar todos los ciudadanos.
La influencia de clásicos del liberalismo como Maquiavelo, Hobbes y Tocqueville,
se deja ver en algunos autores del republicanismo contemporáneo.
Q. Skinner menciona que el fundamento de todo buen gobierno debe ser la
preservación de la libertad ciudadana; muestra su desacuerdo con algunos
filósofos actuales que pretenden deleitarnos con imaginativas utopías basadas en
la supuesta existencia de modelos políticos universales, atemporales y
omnicomprensivos.